REFUNDAR
PRACTICAS SOCIALES PARA UN PROYECTO DE SOCIEDAD SUSTENTABLE
Tal
vez sea oportuno transcribir algunas frase escritas por Guattari, luego
de la visita que hiciera en 1992 al Cono Sur, de un artículo
llamado "Para una refundación de las prácticas sociales",
en el que expone ideas a tener en cuenta al plantearnos el futuro.
"Resulta dificil hacer que los individuos se salgan de sí
mismos, que tomen distancia respecto de sus preocupaciones inmediatas
y que reflexionen sobre el presente y el futuro del mundo. Para ello
se necesitan incitacione colectivas. Sin embargo, la mayoría
de las antiguas instancias de comunicación, de reflexión
y de concertación se han disuelto en beneficio de un individualismo
y de una soledad muchas veces sinónimo de angustia y de neurosis.
Es en ese sentido que preconizo -bajo la égida de un tipo de
articulación inédito entre ecología ambiental,
ecología social y ecología mental- la invención
de nuevos dispositivos colectivos de enunciación que conciernan
a la pareja, la familia, la escuela, el barrio, etc,
¿De qué manera producir, en el clima actual de pasividad,
un gran despertar, un nuevo renacimiento? ¿El miedo de una posible
catástrofe será suficiente motor en este terreno?
El acento se traslada a la necesidad de la recomposición de una
concertación colectiva capaz de desembocar en prácticas
innovadoras. "Sin cambio de mentalidades, sin ingreso en una era
posmediática, no habrá acción duradera sobre el
medio ambiente. Pero sin modificación del entorno material y
social, no habrá cambios en las mentalidades.
El progreso no está ligado, ni mecánica ni dialécticamente,
a las luchas de clases, al desarrollo de las ciencias y de las técnicas,
al crecimiento económico, al libre juego del mercado... El progreso
social y moral es inseparable de las prácticas colectivas que
asumen su promoción.
Una condición primordial para la promoción de una nueva
consistencia social residirá en nuestra capacidad para hacer
emerger nuevamente sistemas de valores que se opongan al laminado moral,
psicológico y social al que procede la valorización capitalista,
exclusivamente centrada en el beneficio económico. La alegría
de vivir, la solidaridad, la compasión por el prójimo,
deben considerarse como sentimientos en vías de extinción
y que urge proteger, vivificar, reimpulsar por nuevas vías. Ir
hacia una refundación de las prácticas sociales.
"Me
parece que el laboratorio del futuro está en América Latina
y que es aquí donde se debe tratar de pensar y experimentar".